Este año, de nuevo, tenemos que volver a realizar nuestro pequeño homenaje a las 55 mujeres asesinadas a manos de sus parejas, sus ex-parejas o sus ex-novios.
Intentamos transmitir sobre manos blancas mensajes de solidaridad y de repulsa por estos 55 asesinatos.
¿Podemos evitar estos hechos? No. Pero si podemos EDUCAR Y FORMAR A NUESTROS HIJOS E HIJAS, A NUESTRO ALUMNADO en la resolución de conflictos de forma pacífica, no incitándolos a la violencia, ni a una mala competitividad. El diálogo es la solución.
